Cuando te llega desde el Universo, más precisamente de las “Hueste Celestiales”, la “Energía Divina Superior” de disponerla para la Curación y Sanación de tus semejantes, y lo que voy a manifestarte, por favor tómalo en consideración, ya que es de suma importancia, y debes tomar conciencia de lo siguiente:
Te llega el Conocimiento, a través de la “Adecuada Lectura”, que existe una “Energía Divina Superior”, la cual no se encuentra sobre la faz de la tierra, esa “Energía Divina Superior”, a la cual le hago preponderancia, ya que esa “Energía” manifestada proviene del “Sol Central”, madre de todos los Sistemas conocidos y no conocidos por la Raza Humana.
Esa” Energía Divina Superior”, la cual ya la has puesto en funcionamiento en toda vida espiritual, física y mental, y a tu criterio es muy buena, es tu deber como Hijo de Dios, comenzar a Distribuirla, y de esa forma se cumple el Mandato Divino, lo que se recibe de “Gracia”, o sea, en “Gracia de Dios”, se entrega de la misma forma que se recibió, de “Gracia”.
No puedes, y no debes lucrar con lo que se te ha dado, porque así como se te da, así también se quita.
No puedes, y no debes someter a tu prójimo por tus intereses espurios y miserables
No puedes, y no debes especular con la necesidad de tu semejante.
No puedes, y no debes adorar a dos señores, o sea, el bien y el mal.
Te recuerdo que eres un simple mortal, y por ende, no te jactes de tus poderes mal habidos, porque lo mal habido, se va como llegó.
Esa “Energía” manifestada es Prestada, es algo circunstancial que hemos recibido, y por ende no debes negociar con ella, y si así lo haces, eres un simple Mercader, un ser totalmente miserable y primitivo, en la antigüedad le llamaban Fariseos.
Toma con mucha consideración este modesto desarrollo, es para tu propio bien, si continuas con tu forma errónea de utilizar la “Energía Divina Superior”, te irás sumergiendo en tu propio lodazal, y atándote por tiempo indefinido a la “Rueda de la Reencarnación”, como así también, estará presente en toda tu vida física material, la “Ley de Causa y Efecto”, tanto se hace, tanto se paga, y vaya que se paga, quien deba que pague, quien merezca que reciba.
La “Ley” se estará ejecutando hasta que el individuo tome conciencia de la realidad.
Como toda la humanidad o gran parte de ella, tienen conocimiento de muchas civilizaciones antiguas o legendarias, han estado sobre este planeta, y puntualmente en distintos puntos del globo terráqueo, Lemúria, Atlántida, Egipto, Aztecas, Mayas, Incas, Aymaras, todas estas grandes civilizaciones disponían del conocimiento en la utilización de la “Energía Divina Superior” o “Magia Blanca”, lograron un dominio extraordinario sobre esas técnicas, las cuales las comenzaron a utilizar a su forma egoísta y empezaron a someter al resto de sus semejantes, por el solo hecho de disponer de esa “Energía”, se sentían superiores al resto.
Cuando comenzaron con el mal uso de esa “Energía”, a esa manifestación humana, se le llama Magia Negra.
El común de los mortales a la fecha terrena, aun hoy siguen disponiendo de esa Energía Mal Calificada, y la utilizan en cualquier orden, desde Países, Continentes, Regiones, Gobiernos, Estados, Ciudades, Pueblos, Localidades, Comunas, Intendencias, y desde luego de toda existencia de vida humana en esos lugares, como así también, en cualquier idioma, en todos los estamentos o niveles sociales, dispongan o no de bienes materiales, con cultura o sin ella, profesando alguna religión, culto o secta, hacen un mal uso del conocimiento Divino.
Es tan miserable tanto aquel individuo que pide y paga para que hagan tan o cual cosa, contra otro de su misma raza, como aquel individuo que lo hace, previo pago.
La “Magia Blanca” o “Energía Divina Superior”, fue dada a la humanidad para el buen uso de la misma, la Raza Humana cuando se encuentra confundida y es desde luego mal intencionada, la utiliza mal es ahí cuando se transforma en lo que se conoce como Magia Negra.
En función de este desarrollo manifiesto: “Por el Mandato Divino de Mi Padre YO SOY y de Mi YO SOY, el que SOY, YO DECRETO: Va hacer la Voluntad de Dios y jamás de las Personas, manifestada aquí y ahora, Amen”
“UNO CON DIOS ES MAYORÍA, UNO ES LA VERDAD”