El ser humano, no importa cuán débil sea, no importa cuán limitado se encuentre, no importa cuán atrasado se sienta, posee lo que llamamos el PODER DE INVOCACION.
Esto significa que al enfocar la atención en algún Ser Espiritual, bien sea Maestro Ascendido, Entidad Luminosa o Dios mismo en cualquiera de sus representaciones, logra instantáneamente que la Entidad se traslade a su lado, con todo Su Momentum Cósmico (que siempre es mucha más amplio que la Tierra), y lo grande es que atiende a la Invocación, aunque se encuentre en el punto más lejano del Universo interestelar, como dice Saint Germain, “aunque yo esté fabricando una estrella”. Además, permanecerá irradiando todo el tiempo que se le necesite.
Aquello chelas (estudiantes) que encuentren muy difícil arrodillarse mentalmente ante su Cristo Interior, que usen el Poder de Invocación con la intención centrada en su idea personal de Dios.
Esto les ayudará a desarrollar la Conciencia Crística. Muchos creen que ésta se desarrolla por medio de la fuerza de voluntad, No es verdad, Esta no sirve sino para mantener fija la atención de Dios. Te repito el consejo: Suéltalo todo y déjaselo a Dios.
Texto extraído del Libro Metafísica 4 en 1 de Conny Mendez.
