Ahora bien, en este momento que te encuentras en este tú paso terreno, ¡mírate! en el espejo de tú vida, ¿Qué has hecho por tus hermanos de tú misma raza?, ¿Qué palabras de aliento has entregado a tus semejantes?, ¿Qué desprendimiento material has realizado en favor de lo que menos tienen?, pero ojo, no te confundas con disponer bienes ajenos, llámale erario público, para darlos a otros, en pos de tus apetencias personales o políticas, no es de esa forma que se hace, debes disponer de tus propios bienes para hacer beneficencia.
Es bueno y necesario dar de gracia lo que dispones para tú persona.
Debes dejar un precedente en este tú paso terreno, debe quedar grabado en los Registros Akáshicos de tú Alma, lo que has hecho por y hacia todos tus semejantes, es lo que sumara a favor en tú próxima reencarnación.
Aquí hemos llegado con el propósito de Evolucionar y lograr la Ascensión a las Esferas Superiores, lograr vivir y dar para vivir a todos los seres humanos.
Te vuelvo a preguntar ¡mírate! en el espejo de tú vida, y procura ser un mejor exponente humano.
Te recuerdo que de alguna manera que no vivas para y hacia los demás, apenas vives para sí mismo.
No debes quejarte de cómo te trata la vida, ¡mírate! en el espejo de tú vida, te pregunto. ¿Qué haces para modificar en algo tú situación?.
Cuando nada te sale bien, ¡mírate! en el espejo de tú vida, y pregúntate, ¿Qué estoy haciendo mal?, es una señal de un cambio interior.
¡Mírate! en el espejo de tú vida, y aprende si todavía no lo has hecho, a vivir para Servir, de eso se trata, el Servir es un gran sentimiento que nace en lo más profundo de nuestro corazón, el corazón es vida, y la vida es DIOS.
La vida, siempre te devuelve lo que tú haces por y hacia los demás, Causa y Efecto, siempre sigue su curso.
Deja de lado los prejuicios inculcados desde tú concepción, rompe con todo lo que has conocido a la fecha, aprende y de una vez por todas, aquí hemos llegado a este plano llamado Tierra, para Servir, como lo hizo nuestro Hermano Mayor, Jesús El Cristo.